lunes, 10 de febrero de 2014

Los Sentimientos

1. ¿Qué son los sentimientos?
       Son potencias del alma que conmueven nuestro ser interior
lo que nos hace humanos es aquello que hacemos
con ese sentimiento que se nos dio.
(Jaime Barylko) 

Relato
Carla está enojada y decepcionada con su compañera y amiga Analía. Se conocen desde algún tiempo
atrás y el vínculo ha crecido en afinidad, aceptación, simpatía, confianza, idealización y afecto.
Analía, hace una semana, le pidió que le prestara un abrigo para un acontecimiento.
Carla le ofreció, generosamente y con agrado, un chal que pertenecía a su abuela, y le encargo que lo cuidara, porque para ella tenía valor sentimental, le recordaba a su abuela tan querida.
Cuando Analía se lo devolvió, Carla se encontró con que el chal estaba quemado.
Se sintió mal, con impotencia, angustia, fastidio, indignación y enojo.
No solo no volvió a ver Analía, sino que ella tampoco se disculpo por los ocurrido.
Este hecho produjo un cambio en los sentimientos de Carla respecto a su amiga y con el transcurso de los días, creció su rechazo y bronca por los ocurrido.

Psicoeducación - El Sentimiento
El estado de ánimo, emocional y mental, provocado por estímulos externos, como percepciones, provenientes de los sentidos; y/o internos, como ideas, prejuicios, recuerdos, creencias, sensaciones corporales, etcétera.
Estos estímulos conmueven nuestra psiquis. Según sean los estímulos positivos o negativos, originan sentimientos de adhesión, agrado o de rechazo y desagrado.

Estos sentimientos de adhesión o de rechazo los manifestamos exteriormente, a menudo, en el rostro, con las expresiones.
Las vivencias de placer o displacer generan conductas, físicas, afectivas, valorativas y/o sociales, relativamente estables en el tiempo, que influyen en nuestro humor.

Composición de los sentimientos
Este estado de ánimo complejo se compone de:
Emociones + Tiempo + Afecto + Valor + Estabilidad

Representados en la ecuación 

Analicemos los contenidos de la ecuación:
  • Las emociones: pueden ser de agrado o desagrado.
Cuando son de agrado, la respuesta habitual es de acercamiento al estímulo, de adhesión.
Cuando son de desagrado, la respuesta habitual es de distanciamiento del estímulo, de rechazo.

  • El tiempo: estas emociones de agrado o desagrado se construyen y refuerzan a través del tiempo; en un sentido positivo o negativo. El tiempo les otorga estabilidad y permanencia.
Así, el sentimiento positivo de agrado materno-paterno-filial se irá reforzando con el agregado del sentir positivo valorativo, esencia de la maternidad-paternidad en el transcurrir del tiempo.

  • El afecto: es una pasión del ánimo que esta presente en los vínculos significativos. podemos reconocer dos polos:
    • Afecto de adhesión: polos positivos: agrado - aceptación.
    • Afecto de rechazo: polo negativo: desagrado - rechazo.
  • El valor: significa que asignamos:
    • Un valor positivo: te aprecio, te valoro, me agradas, me adhiero a ti.
    • Un valor negativo: te rechazo, me desagradas, te desprecio.
Si ambos valores coexisten al mismo tiempo, estamos ante un conflicto valorativo - sentimental.

Los sentimientos son de agrado o desagrado
Los sentimientos son más estableces que las emociones; y cuando son trabajados, facilitan la armonía del psiquismo y dan sentido humano a la vida.
Cuando son agradables, generan adherencia y la percepción de beneficio. Por el contrario, cuando son desagradables, producen rechazo y la percepción de perjuicio.

Los sentimientos son subjetivos
El sentimiento es una expresión directa, personal, única e irrepetible; y es subjetivo (perteneciente o vivenciado por individuo afectado).
Los sentimientos se perciben con agrado o desagrado y son valorados en un función de este grado +, o desagrado -.
El sentimiento es una reacción - respuesta, consciente o inconsciente, a una o más experiencias. Refleja el afecto que esa experiencia ocasiona a la persona.
El sentimiento se relaciona con la cultura del sujeto.

Los sentimientos pueden ser propios o ajenos
Los sentimientos propios se asocian a nuestra manera personal de vernos a nosotros mismo y de ver al otro.
Los sentimientos ajenos se refieren a la manera personal que el otro tiene de verse a sí mismo y de ver a los otros.

Los sentimientos se pueden transformar
Analicemos los pasos esenciales para transformar los sentimientos.
ante una vivencia que provoca un impacto en nuestro sentir, necesitamos transitar un proceso que implica etapas:

  1.  Aceptando: significa recibir voluntariamente una cosa.
  2. Asintiendo: significa admitir como cierto lo recibido.
  3. Renunciando: significa resignarse a que la realidad "es lo que es", más allá de lo que uno quiere que sea.
  4. Reestructurando: significa modificar la estructura de algo.
  5. Reaceptando: significa aceptar la realidad. Implica modificar la estructura mental anterior al impacto del sentir. Ampliar nuestra mirada.
  6. Se produce el cambio significativo: significa aprender y crecer como persona. Luego de modificar y ampliar nuestro esquema mental, pegamos un salto cualitativo y transformador. Así, evolucionamos en el proceso humanizador.  
Transformar los sentimientos es un acto de libertad
Estos pasos mencionados son actos libres de la voluntad. Es preciso transitarlos conscientemente.
A su vez, estos pasos no son lineales, sino que hay avances y retrocesos, como en todo proceso vital. Lo cierto es que ya no somos los mismos, hemos crecido.

¿Cómo lo hacemos?
Todos estos pasos son necesarios, y se logran a través de un diálogo interno entre mi yo y lo que me dice el sentimiento.
También es muy valioso dialogarlo con otra persona que sea significativa para nosotros.
Hay que tener muy en cuenta que las personas que nos miran con amor y nos permiten ser lo que somos, sin juzgarnos, son las personas que nos posibilitan crecer y madurar sanamente.

Articulando esta teoría con la práctica 
Veamos que nos enseña el relato:
Cuando el afecto es leal, sentimos agrado. este afecto es positivo y dinamizador.
Por el contrario, ante una deslealtad, sentimos desagrado y decepción.
Esto nos provoca frustración y una sensación afectiva de pérdida, rechazo y dolor.
En el relato, Carla se "toma a mal" la actitud de la amiga,como es humano y esperable que ocurra frente a una situación similar.
Observemos como opera la subjetividad en Carla:
1. Carla tenía sentimientos de amistad, compañerismo y generosidad con su amiga.
2. La abuela es un sentimiento de amor, y ese chal se lo recuerda y concretiza.
3. La percepción del chal quemado provoca emociones de desagrado, disgusto y bronca.
4. Estas emociones repercuten interiormente, logrando que se sienta mal con el hecho.
5.  Este sentirse mal con el hecho aumenta consecuentemente su decepción.
6. A su vez, que su amiga no aparezca ni de explicaciones es vivido como un sentimiento de abandono.
7. Esto genera un cambio de sentimientos: impotencia, angustia, fastidio, indignación y cólera.
8. A medida que el tiempo transcurre, se incrementan los sentimientos de bronca y rechazo.

Transitando la experiencia conscientemente  
Ahora bien, ¿qué necesita Carla para transitar esta experiencia y salir fortalecida de ésta?
1. Aceptar: Carla necesita recibir voluntariamente la noticia y su enojo.
2. Asentir: Carla necesita validad este enojo. Decir sí a su enojo; después de todo, su chal era valioso para ella. Está muy bien su enojo.
3. Resignar:
     a. Objetivamente: renunciar a tener el chal impecable, tal como estaba en su estado original.
     b. Subjetivamente: renunciar a la idea interna del chal impecable.
4. Reestructurar: separar a. de b. Es decir separar el objeto (chal) de la representación interna de éste (me conecta con mi abuela a quien amo)
5. Reaceptación: voluntariamente, Carla acepta la nueva realidad:
     a. Objetiva: El chal esta dañado y
     b. Subjetiva: puede separar el sentimiento que la vincula al chal = abuela (vínculo positivo, bueno)
6. Cambio significativo: Carla aceptó su propio enojo y desagrado por el chal dañado, se aceptó tal como es y creció en el amor por sí misma; base del amor al otro. Además, pudo diferenciar el chal quemado del sentimiento que la unía a él.

Partiendo de la aceptación de "lo que es"
Es importante destacar que lo que necesitamos para transformar nuestros sentimientos es aceptarlos, darles un lugar y decirles sí.
De esta manera logramos serenidad y la energía necesaria para continuar con los otros pasos: renunciar, reestructurar, reaceptar, y establecer un cambio significativo.
También hay que tener en cuenta que estos pasos no lo transitamos de forma lineal. Sino que vamos y venimos de los pasos 1 a 6, haciendo pequeños cambios, hasta que alcanzamos el cambio significativo.

TRABAJO PERSONAL
1. ¿Qué entendemos por sentimientos?
2. ¿Cuál es la composición de este estado de ánimo?
3. Describir cada elemento de la composición.
4. ¿Qué implica agrado - desagrado, adhesión - rechazo?
5. ¿Qué opinión nos genera la relectura del relato?
6. ¿Cuáles eran los primeros sentimientos de Carla para con su amiga?
7. Releer el análisis de los acontecido
8. ¿Qué significa lo "tomó a mal"?
9. ¿Por qué decimos que la abuela es un sentimiento?
10. ¿Qué emociones dispara Carla ante la percepción del chal quemado?
11. ¿Qué sentimientos genera Carla después que se lo "tomó a mal"
12. ¿Qué factor aumenta su decepción?
13. ¿Cuáles son los nuevos sentimientos de Carla?
14. ¿Qué entendemos por reestructuración?
15. ¿Cuáles son los pasos esenciales para transformar los sentimientos? 
16. ¿Por qué debió separar los recuerdos de la abuela del chal?